Los desastres y emergencias son noticias de especial relevancia; sobre todo por su especial carga emocional, aunque responden plenamente a los criterios de noticiabilidad más repetidos como novedad, imprevisibilidad, evolución futura de los acontecimientos y cantidad de implicados. Pero precisamente estos rasgos hacen que sean temas especialmente difíciles de tratar. "Es responsabilidad de la prensa informar con una visión de respeto hacia las víctimas y con un carácter noticioso que procure soluciones y aliente la prevención. Estas informaciones deben llevar un referente ético y científico con el fin de trascender la sensación de alarma" señala la Organización Panamericana de la Salud (OPS), editora de una guía sobre este tema: Manual periodístico para la cobertura ética de las emergencias y los desastres.
El respeto por los afectados, la calidad u ofrecer información de servicio son problemas importantes a los que se tiene que enfrentar el periodista que cubre estos sucesos, aunque evidentemente están presentes en cualquier noticia con víctimas por lo que los consejos que da este manual son de interés no solo en casos extremos como un terremoto o una inundación.